sábado, 27 de noviembre de 2010

La Rama - (V) Anticrónica de la Señorita Filiberta Cascajo - Anticrónicas de una Rama

Queridos y sufridos amigos,
Os dejo la última anticrónica de la saga que escribo en el portal La Rama.
Son malos tiempos para la lírica que profetizaba en su día el grupo de la movida "Golpes Bajos". Pero como le he dicho a Lisebe en su blog, siempre abrá un hueco en el universo del internet para escribir un verso o incluso una parida como esta.
Espero que os guste.
Un abrazo



La Rama - (V) Anticrónica de la Señorita Filiberta Cascajo - Anticrónicas de una Rama

miércoles, 10 de noviembre de 2010

La Reina de la Cueva

Queridos y sufridos amigos,
Hacía ya casi un año que no meneaba mis plumas por este universo y he decidido parafrasear aquello del "Decíamos ayer" de Fray Luís de León con este poema que grabé en el portal de la Rama hace unos días con la inestimable ayuda de mi hermana Montse.
Espero que os guste. Deciros que sigo visitando, en silencio y con devoción, muchas de vuestras entradas.
Un abrazo


La Rama - LA REINA DE LA CUEVA - El arcón de la poesía.

domingo, 22 de noviembre de 2009

No cae ni una gota

Queridos y sufridos amigos, solo unas letras para deciros que por estos árboles de "la mediterránea" no cae ni una puñetera gota de agua. Deciros que nuestros campos tienen sed y nuestras ciudades, tan imbéciles como siempre, ni chicha ni limoná... es decir, que les trae al pairo el hecho de mirar al cielo para observar la evolución de la vida. En las ciudades, como siempre, se piensa más en la próxima visita al proctólogo o, en su defecto, al hipercons, que relativizar y sosegarse un poco en el tacto rectal de la naturaleza y sus consecuencias colaterales irreversibles.
Queridos y sufridos amigos, solo unas letras para deciros que estoy de vuelta, creo que recuperado de mis males del cuerpo o del alma, que esos si que escuecen y no ceden ni con analgésicos del tipo i bu pro fe si que tanto se ha puesto de moda últimamente a raíz de la gripe que nunca existió, sino en los bolsillos de cuatro, o cinco o, tal vez ¿seis? Seis los Keys, o sino que se lo pregunten a las farmas ceuticas, que ni son de Ceuta ni les gusta la moda...
Os saludo desde la ausencia y me despido desde la presencia, desde estas desgraciadas líneas que me decidí a escribir una tarde de otoño mientras la hojas del desvencijado álamo que me acompaña cada vez que miro hacia el exterior, se rompen en el aire porque no quieren ser pasto de la mierda de cuatro perros.
Un abrazo y, si acaso, nos vemos...